La Polinésia


Vamos a visitar virtualmente las más principales de este sueño dorado como son las Islas paradisíacas de La Polinesia. La magia de Tahiti con su exuberante fragancia tropical y el tipismo de su zona portuaria. Moorea con sus agudos picos, profundos valles, hermosas lagunas y las espectaculares bahías de Cook y Punahi. Bora Bora rodeada de un arrecife de coral que encierra la laguna más bella del mundo bajo radiantes cielos luminosos. Rapa Nui, la más alejada, la que conserva mejor, pura y genuinamente sus ancestrales tradiciones y sus misterios…

TAHITI

MOOREA

BORA BORA

RAPA NUI (ISLA DE PASCUA)

La Polinesia  

 

Se la llama La Polinesia Francesa y está formado por cinco archipiélagos y un total de 118 islas. Su clima es tropical y permitiendo disfrutar todo el año de una temperatura media de 27º. No hay que olvidar Rapa Nui o Isla de Pascua, aunque políticamente pertenece a Chile forma parte también de La Polinesia

Los accesos normales para acceder a la Polinesia pueden ser:
Vía Paris – Los Ángeles o San Francisco – Honolulu. o bien desde Santiago de Chile que os permitirá además visitar la Isla de Pascua (Rapa Nui), la primera isla de La Polinesia. Ya desde el otro hemisferio se puede acceder desde Sydney (Australia) o desde Auckland (Nueva Zelanda), desde Tokio y también desde Osaka.

En su origen cada una de estas islas fue un volcán en plena actividad. (Las islas más altas son Tahití, Moorea y Bora Bora). Cuando la parte del volcán original desapareció debajo las aguas, lo único que permaneció fue una corona de coral de caliza, actualmente los atolones. Prácticamente todas estas islas están rodeadas de arrecifes de coral que bordean magníficos lagos de color turquesa con playas de arena blanca. Alguna vez un islote surge del lago, son los conocidos «Motus».

Políticamente pertenece a Francia aunque posee un tratado autonómico. Pomare V, último rey de la Dinastía Pomare, cedió su reino a la República Francesa. Actualmente se rige por un estatuto de autonomía interna que confiere a las instituciones locales los poderes. El Estado Francés está representado por un Alto Comisario.

Clima: Refrescadas por los vientos alisios del Pacífico el clima es soleado y agradable. Dos Estaciones: De Diciembre a Febrero, calor húmedo de 27 a 35º; de Marzo a Noviembre es más seco y «fresco» de 21 a 27º. La otra estación, la de las lluvias de noviembre a marzo.

La mejor época del año para visitarlas entiendo que es en los meses de Abril-Mayo-Junio. Las temperaturas varían poco en el transcurso del año.

El agua es transparente teniendo una temperatura de media más elevada durante el verano austral (Enero-Febrero) 27º de media.

Equipaje: Ropa de verano, de playa, deportiva y preferentemente prendas de algodón. Un liviano cortavientos o jersey para las noches, a veces más frescas. Calzados: zapatillas, zapatos de barco y zapatillas de goma para andar por los fondos coralinos y evitar cortes y rozaduras. Aunque en todos los lugares prestan de forma gratuita los aparatos de snorkel (Máscara y tubo para inmersión de los que se sostienen en la boca)), al tratarse de un artículo bastante personal y dado a su escaso coste aconsejamos se lo traigan consigo o bien lo adquieren allí mismo. Es imperativo: traje de baño, lentes de sol, sombrero, cremas protectoras y una fuerte loción anti mosquitos (muy necesario en determinadas épocas del año y sobre todo al «caer» la noche).

Lengua.- El Tahitiano es la lengua que utilizan en la Polinesia. Se caracteriza por una profusión de vocales. La segunda lengua es el francés. El Tahitiano continua en plena evolución, se creó una academia para la defensa y promoción de la literatura moderna.

Algunas palabras polinesias: Vahine (esposa); Iorana (Buenos días); Tiaré (Flor); Niu (Coco); Faré (Casa) Maruru (gracias); Onana (adiós). El Tahitiano siempre tutea.

La gente: Ia Ora Na, Maevea y Manava son las tres palabras de saludo y de bienvenida que los polinesios desean a sus habitantes. Este recibimiento heredado de la tradición hospitalaria legendaria se manifiesta, a la llegada.
Con cantos acompasados de guitarra y ukelele en una alegre banda, y a través del obsequio de Tiare (la flor emblemática polinésica con un perfume muy suave). A los turistas esperados y a los amigos se les coronan con collares de flores multicolores para testimoniar la alegría de los encuentros.
El polinesio está contento y orgulloso de sus islas. Desea compartir toda esta alegría de vivir con sus invitados, así como el gusto natural por el baile. Todos los bailes y su música, cantos polifónicos son mayormente a ritmo de percusión de los pahu y toere, instrumentos tradicionales y también con la armonía de las guitarras y ukuleles de la orquesta kaina.
El cariño por los regalos de la naturaleza, se refleja también en la pasión por el mar a través de la pesca, el surf y la práctica de la piragua ancestral, convertido en el deporte principal de la isla .El visitante no tiene más que recibir y dejarse conquistar. Una sola palabra clave que hay que aprender o memorizar: mauruuru (gracias).

Niña Tahitiana Mamá Tahitiana

  
 

Tatuajes polinésioa – Kaimurha nuestro guia

  
 

Folklore: La música y la fiesta, en general, forman parte íntegra de la vida de los habitantes. No es difícil encontrar un músico tocando el Ukelele (pequeña guitarra) y cantando algunas canciones. Desde la llegada al aeropuerto de Tahití, el Polinesio les recibe con buen humor, su sonrisa y su amabilidad. Una orquesta está allí para darle la bienvenida al turista a pesar del cansancio del vuelo, la magia de la música y el perfume de las flores de Tiare le envuelven. El show polinesio retrata escenas guerreras, poéticas o de leyenda. El «Tamurare» es la danza más conocida por los turistas en todo el mundo. Las fiestas de «Heiva Taupiti», celebradas en Junio, son de gran atractivo. Se trata de grandes fiestas populares organizadas en las islas. Toda la Polinesia canta, baila y organiza torneos deportivos. Los grupos de cantantes están por todos los sitios. Los grandes hoteles organizan veladas tahitianas de calidad (espectáculos de ballets, cantos…)

  
  Religión- La Polinesia agrupa muchas religiones. La protestante es la mayoría, seguido de la católica,, Mormones, Adventistas, Budistas, etc.

Cocina- La cocina Polinesia es de una excelente calidad. También pueden encontrarse restaurantes de cocina francesa y china por todas partes. El pescado ocupa el lugar de honor. El Mahi-Mahi, el Pez espada, el Atún…Los pescados crudos con limón o zumo de coco son deliciosos (Cheviche), las Chevrettes (gambas de agua dulce) forman parte de los platos más apreciados. Las frutas exóticas siempre están presentes: pomelos, limones verdes, papayas, plátanos, piña. Melones. En algunos hoteles organizan comidas alrededor del fuego Tahitiano «el Ahimas» cuya preparación puede durar horas. El fuego se preparar en el propio suelo. Se disponen grandes hojas secas y grandes rocas porosas. Cuando la combustión de la madera ha acabado, el fuego está preparado para recibir los platos que se van a cocer, puestos sobre hojas de plataneros. Se tapa todo con hojas de «Arbress à pain», de tela de yute y de arena para que la cocción sea hermética. El lechón, el pollo, el pescado, el Fafa (parecido a la espinaca), el Uru (fruto del Arbre à pain) , el Fi (plátanos rojos para cocer) y el Poé (Paté  perfumado con frutas), se cuecen al vapor durante cuatro horas gracias al calor que desprenden las piedras. En cuanto a bebidas, la cerveza local Inano y el zumo de frutas que proviene de las plantaciones de Moorea.

Bufé típiico – En Bora Bora

  
  Bufé Tipico (Video Foto)

La Flora y la Fauna. El emblema de Tahití es el Tiare, flor de perfume capital. El primer contacto con las islas es su paisaje, una vegetación muy diversa y colorida. El cocotero, los Oru (Arbres à Pain), los filao, los bananeros, castaños; arbusto con flores: hibiscos, buganvillas, gardenias. El resultado es un paisaje maravillosos lleno de colorido. Los árboles frutales se mezclan entre esta vegetación densa y exuberante.

La fauna terrestre es muy pobre, sin embargo la marina es exuberante. En Polinesia no hay serpientes y entre los animales terrestres, los pájaros, el Morgouillat (lagarto) y el cangrejo de tierra. En los lagos y arrecifes, habita una increíble cantidad de conchas. Los peces rivalizan en color y belleza. En Bora Bora se organizan comidas en la busca de rayas y tiburones. La Polinesia es el paraíso para los amantes del submarinismo.

Documentación necesaria: Pasaporte vigente. No se exige vacunación especial. Está rigurosamente prohibido importar animales vivos, toda clase de vegetales, flores y frutas (salvo certificado fitosanitario internacional)

Horario con relación a la Península: Verano 12 horas menos; Invierno 13 horas menos.

Monedas: El Franco Pacífico unos 0,03€ . Los bancos cierran a las 15,30. Las tarjetas de crédito son aceptadas en hoteles y comercios aunque es conveniente sacar algo en efectivo para determinados lugares y en atolones alejados. Como curiosidad decir que la figura o el acto de la «propina» es una costumbre que no forma parte de los hábitos polinesios o no es usual. La hospitalidad del nativo es fuera de lo común.

El Correo: en Papeete existen numerosas oficinas de correos y su exóticos sellos son muy buscados por coleccionistas. El horario de los comercios suele ser de lunes a viernes de 7,30 a 11,30 y de 13,30 hasta las 18 horas. Los comercios suelen ser bastantes rigurosos en el horario. Los domingos está todo cerrado excepto el Mercado de Papeete que está muy animado desde las 5 de la mañana.

Compras: Collares de conchas. Toda una gama de productos a base de Monoï (coco), aceite solar, champús, jabones.. Sobre todo los célebres pareos exquisitamente decorados. Incluso en los hoteles se hacen demostraciones de las 56 maneras y figuras de atarlos. Objetos esculpidos en madera, las perlas negras de Tahití, la vainilla. El arte de la paja trenzada, una de sus piezas más bonitas son los sombreros que visten las señoras los domingos para ir a misa, además van todas con vestidos blancos. Nácar tallado o pulido, collares y pulseras de conchitas.